RECICLAJE EN FAMILIA
El 17 de mayo se celebra el Día Mundial del Reciclaje para concienciar a la población sobre la importancia de tratar los residuos como corresponden para proteger el medio ambiente, te damos unos consejos para concienciar a los más pequeños.
Nuestros hijos son el futuro de nuestro planeta, por eso es fundamental concienciarlos sobre el reciclaje desde muy pequeños. ¿Cómo hacer que comprendan los problemas ambientales de una manera sencilla y divertida, para que los más pequeños puedan adoptar las pautas correctas y no repitan los errores de las anteriores generaciones? ¡Es fácil, pero hay que ser constante! requiere un aprendizaje tanto práctico como teórico en la escuela y en casa. En el cole puede que tengan pautas de desarrollo sostenible, incluso desde el jardín de infancia hasta la ESO, ¡ya sea en forma de proyectos educativos sobre el tema como con otras actividades que pueden ser hasta divertidas! En casa, el papel de los padres, en lo que respecta al reciclaje en particular, consiste básicamente en apoyar y dar ejemplo, ¡recuerda que son esponjas! Lo primero que puedes hacer es explicarles por qué esto es bueno para el planeta. El reciclaje ayudará a preservar los recursos naturales, limitar la contaminación y prevenir el desperdicio.
¡Salir a pasear por el bosque o hacer picnics en el parque con ellos puede ser una buena forma de explicarles que el reciclaje va de la mano con la protección del medio ambiente! ¡Y además aprovechas para pasar tiempo con ellos! Después de la teoría, ¡toca la práctica! Al final ten en cuenta que cada momento es una oportunidad para mostrar el camino a seguir. cada residuo es diferente, tómate el tiempo que necesites para enseñarle claramente en qué contenedor debe colocarse cada embalaje: cartón, papel, botellas de plástico, latas… el contenedor amarillo, el contenedor verde y el resto de contenedores de basura.
Juega con el reciclaje En los niños, el aprendizaje se produce a menudo a través del juego, ¡y oye así también es más ameno! no dudes en hacer que la clasificación y el reciclaje sean divertidos improvisando pequeños juegos en torno a la clasificación. Todos conocemos la papelera para tirar estos papeles a la basura en la oficina…. ¿Por qué no reproducirlo en casa? ¿En qué contenedor coloco la lata? Un cuestionario puede ser una excelente manera de hacer que el aprendizaje de las reglas de clasificación sea más divertido. Convierte tu basura en un tesoro. Por último, ¿por qué no organizar actividades de trabajo manual "reciclando" sus residuos en casa? El uso de productos y objetos que los niños usan a diario, como tapas de botellas o rollos de papel higiénico, les ayudará a entenderlo mejor.
¡Internet está lleno de ejemplos e inspiración para convertir los materiales en juego!
Y como la cosa va de cuidar el plantea, os proponemos nuestras bambas eco, porque se puede ir a la moda y cuidar el planeta!